Refrito de memorias, sentimientos y lecturas…
…197 años de un acontecimiento por el que desde el puerto de Buenos Aires se oyó un grito. Como todos los gritos, que suelen ser sonidos desarticulados, en estas tierras trataron de ordenar el tablero de acciones cada uno a su modo. Cuando leemos la Representación de los hacendados de M. Moreno, podemos sentir cierto escozor sobre nuestros orígenes (bueno al menos a mí me pasa esto, es cierto que en la actualidad leer, reflexionar sobre historia es mal visto). Allí detalla el contrabando que se lleva a cabo, Moreno en la Representación defiende el libre comercio. Convengamos que Moreno en torno a las circunstancias de mayo se transforma, desde ese lugar en los escasos siete meses que van desde mayo a diciembre, escribe y actúa. Ya es otro.
En un acto escolar, en mi pueblo y cuando tenía trece años, escuché el discurso de un joven que estaba terminando la secundaria. La gente no entendía nada. ¿Qué había querido decir ese “muchachito” planteando lo económico en relación al 25 de Mayo? ¿Dónde quedaba el ideal de libertad y las etc. que nos habían enseñado en la escuela? Recuerdo algunas críticas, recuerdo que al final del discurso el rector saludó al joven con afecto y admiración. Quizá, fue el único que en ese momento lo entendió. En mí quedó la marca. Ese chico me borró la idealización de la historia, los hombres actúan, la más de las veces, por motivos puramente económicos y egoístas. Qué grito ni que grito.
España bajo el ala francesa, no había rey. Aquí los españoles que quedaban se arrogaban el derecho de seguir gobernando. Los que aquí vivían, españoles y criollos querían “productos”, para ello era necesario el libre comercio (ya lo venían haciendo asquerosamente mediante contrabando)
Tímidamente tras la llamada “máscara de Fernando” Mayo trajo aires nuevos.
Hace como diez años me encontré con un cordobés en Salta, para él el 25 de Mayo no tenía sentido para la patria. Era sólo un acontecimiento de Buenos Aires.
No entendía cómo podía seguir en esa posición. Me parece bien no idealizar el pasado, pero tampoco renegarlo.
Es cierto, esta sociedad “patricia” de Buenos Aires, que se adjudicó muchos derechos, tiene una pasado un tanto “roñoso”. Pero como todo confluyó en un 9 de Julio de 1816 ¿no adquirió cierto prestigio? ¿En Tucumán no trataron de reconocer que el interior tenía que decidir también? ¿El cordobés tendría ancestros fusilados por Castelli? Recuerdo que nos juntamos en una peña y hablamos de historia.
Lo lamentable es que, después de jugar a ser libres, sigamos atrapados en las redes de los capitales foráneos a los que les importa tres pepinos nuestra gente y nuestro país.
David Viñas dice de la burguesía porteña, en formación entre finales del siglo XVIII y los primeros años del XIX, que era lúcida y agresiva, liberal en economía pero, al mismo tiempo, nacional en política por ser cada vez más consciente de la crisis, inoperancia y disolución del viejo imperio español, y que escrupulosamente ya había tomado nota del desastre de su armada en Trafalgar.
¡Lástima! A casi 200 años de este hecho no aprendimos nada. El saqueo paso de manos de los españoles a manos de los ingleses, de los ingleses a manos de los yanquis, y ahora al mundo globalizado. No sólo en Argentina, en toda Latinoamérica. ¿Qué no juegue a víctima? No. Simplemente, me molesta que con esto del derecho, las leyes y las no sé qué, también, nos tiren la culpa y las deudas a nosotros ¿No? Digo por esto de las mineras que nos van a dejar la tierra envenenada, de las papeleras y de todas las fábricas basura que no quieran tener en otro lugar.
Dicen que hay crímenes de lesa humanidad que no prescriben. ¿En qué quedó lo que le hicieron a esta tierra, a los aborígenes?
El pasado no fue una pinturita, pero tampoco aprendimos de los errores, de la gente que cambió de forma de pensar y en el camino fue eliminada como Moreno. ¡En fin! 200 años igual, diría Gieco.
------
A propósito: una compañía de buceo encontró un barco hundido, se disputan la propiedad del tesoro. La pregunta es ¿de dónde salió todo ese oro, plata y piedras preciosa?
Con el chiste de los cómplices internos el derecho ampara lo que 500 años no lograron solucionar.
Cuando escucho alguna “blanquita” de estas tierras reivindicar nuestra condición de hijos de europeos (doble nacionalidad mediante, europeos de segunda, maltratados cuando vamos por Europa. Lo digo porque fui sospechosa de migración ilegal, cuando fui de paseo, a pesar de mis tickets de avión, tarjeta de crédito local, etc. etc.) Me da muchísima bronca. ¿Por qué? Porque es seguir creyendo que Argentina termina en la general Paz. Las villas no existen porque sí, existen porque el puerto miró y sigue mirando hacia fuera dando la espalda al otro país, el del desempleo, el del analfabetismo, el de la violencia de la falta de comida, el de la inducción a comprar lo que no se puede, el de los hospitales que no dan abasto… Los ganaderos ¿siguen pensando “no tenemos que financiar el bife a los pobres”?