Sofi, 10 días

Querida Sofi:

El domingo pasamos, en lo de los “Totos”, sin vos el día de la madre. Tu mamá estuvo un rato con nosotros. Abu Pupú se encargó de llevar hasta la clínica a tu mami por la mañana, irla a buscar después de medio día y regresarla a las cinco de la tarde. Parece que para los nacimientos de ustedes el auto que maneja tu papi se empecina en no andar. Cuando nació Nico, el auto de tía Pau y Dani, que le habían prestado a tu papi se negó a andar, ahora el auto de tus papis tuvo inconvenientes con la dirección hidráulica (te cuento que ni sé de que se trata).

Tus están muy contentos porque los informes médicos son muy alentadores; seguís pasando de grado ya estás en Neo 4.

A tu mami le dijeron ayer que no vas a ir ningún desfile de modas, parece que tu mamá llevó mucha ropa para que te cambien. Te cuento que antes de que nacieras ya había comprado unas hebillitas muy mononitas para vos y otras para tu prima Emma –espero que no te las vaya a poner ya- creo que tu mami tiene muchas ganas de jugar a las muñecas con vos.

Si seguís progresando como hasta ahora, vas a salir de Neo antes de lo que pensábamos; espero que todo siga así –aunque me gustaría que te dejaran un tiempito más en neonatología. Tu hermano está con tos, abu Pupú siente malestar en la garganta, yo estoy más o menos… Sos tan chiquita que me da miedo te contagiemos un resfriado.

Mi peque, mañana es otro día de visita para los abuelos. Voy a ir, por supuesto me voy a poner el protector de ropa, barbijo y te voy a saludar de lejos. Abu Pupú no quiere ir por temor a contagiarte.

Los martes después de cuidar unas cuantas horas a Emma y a Nico quedo un poco cansada, pero muy feliz. Verlos correr de aquí para allá, escucharlos hablar, cantar y gritar es la mejor vitamina para mis años. Cuando miro a tu hermano y a tu prima pienso en vos; el primer tiempo, a upa y, luego, corriendo detrás de ellos.

Un beso grande, que tengas dulces sueños.

Abu Amy