27.11.07

Grajeas sueltas en Baires

Lunes 26. 9,20 horas Esperé hasta esa hora para tomar el subte de la línea B con la esperanza de poder viajar un poco mejor que una sardina.

Pasó una formación rebosante de pasajeros con cara lánguida, algunos risueños y otros con cara de bronca.

El siguiente no fue mejor. Llenito, pero supongo que menos que en Japón de donde vienen los vagones usados que Metrovías pone a nuestro servicio.

Entré y no pude pasar del borde, la puerta cerró en mi espalda como si fuera una cepilladora de madera. Un pasajero, con cara de asquito y muy delicadito masculló: No sé porqué se expone al dolor. En lugar de dejar pasar lo dicho, recogí el guante y con mi mejor tono explicativo le respondí “Ya dejé que pasara uno. Pagué y quiero llegar a horario.”

Recordé que cuando era niña un cura muy alto nos contó de la ventaja mía de ser alta para viajar en el subte en Tokio. (Nunca fui y no sé si me gustaría ir). Las manijas del lado de afuera del vagón (una a cada lado de la puerta) me hicieron sonreír. Según me dijeron, en ellas se apoyan los “empujadores” para que no haya gente sobresaliendo en el momento que se cierran las puertas.

Después de dos o tres estaciones ya estaba en medio de la gente que subía y bajaba. De repente se liberó un lugar para sentarme. Antes de ello miré la cara del pasajero que seguía apoltronado al lado de la puerta.

Sinceramente, me considero una afortunada de no tener que hacer este tipo de viaje más que para ir a los controles médicos. Siempre pude trabajar a contramano de la mayoría de la gente de mi ciudad, cuando ellos ingresan a la ciudad yo voy en sentido contrario.

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Martes 27,

10,15 Suena el teléfono y atendí pensando que podía ser una de mis hijas. Encuesta. Pensé en lo difícil que les resulta a esas trabajadoras conseguir alguien que les de bolilla. La voz me recordó a mis hijas. Y bue... a responder se ha dicho. Era sobre políticos. Respuestas cerradas. Como si todo fuera tan simple. Me preguntaron si la solución a la inseguridad era que la policía pasara al ámbito de la ciudad. Le expliqué que eso era insuficiente, que tenían que cambiar muchas cosas, que es muy complejo, no era eso lo que quería. Yo tenía que elegir entre las opciones que me daba. La mentalidad de los que piensan las encuestas casi siempre rumbea hacia la manipulación de la emocionalidad de los respondentes que frente al aumento de los delitos quieren soluciones mágicas. Una pregunta me gustó, me preguntaron si el jefe de gobierno electo había participado como candidato en las elecciones en la provincia, le contesté "No, fue el primo." Estas cuestiones de apellido, deben ser para probar el grado de información de los respondentes.

12 horas

Volví a viajar al centro médico que queda a poquitas cuadras de Plaza de Mayo. Esta vez viajé mejor. Cuando estaba en camino al subte de la línea E, para ir a visitar a mi nieto, escuché petardos, la policía ponía apresuradamente vallas, unos caños que surgen del piso se levantaban para impedir el paso de los autos… ¡Me cacho! ¡Qué complicado es ir al centro! Me entretuve mirando las palomas que volaban espantadas alrededor de la pirámide de mayo, la manifestación estaba a unas cuadras así que tuve tiempo para ver dos pinturas apocalípticas y una escultura. La escultura (mural) era una gran mano en metal arrugando una carta, al lado una carta en inglés y otra en español sobre los cambios climáticos. En una de las pinturas estaba la Casa Rosada en ruinas, alrededor nada, un fantasma en rojo se erigía en un cielo de fondo oscuro, con mucho violeta, rojo y naranja. Los sonidos de una nueva protesta estaban muy cerca. Seguí rauda hacia la boca del subte. En uno de los bares vecinos a la plaza unos turistas almorzaban disfrutando del sol. La estación subterránea me acogió casi sin gente. No tuve ni ganas de mirar de quien era la protesta. A unas cuadras está aún el edificio donde fuimos a ver un departamento para comprar hace 16 años. ¡Menos mal que el precio y el vendedor me cayeron mal!

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18,46 Escucho la radio:

Ya hay chicos que se descomponen por el olor de la pastera Botnia. (¡Menos mal que era transitorio el olorete! Solo hasta que los filtros se acomodaran.)

Naciones Unidas pide que se limiten las emisiones contaminantes por los desordenes climáticos…

¿Los inventos de Tesla tendrán algo que ver? (La carta pegada a las pinturas decía de la manipulación…) ¡En Fin! Debo releer algunos párrafos de Informe Lugano.

3 Comments:

Anonymous Anónimo said...

* Viajé en el subte C durante muchos años... Muchas veces me pregunté si la cualidad humana de los que viajábamos en esos cilindros de lata no se iba disolviendo con el correr del tiempo, mutando a una especie de ser viviente de extraño (y rutinario) comportamiento.

* Le voy a ser sincero: Como sé que las encuestadoras telefonicas cobran por encuesta completada, más de una vez he dejado la cena enfriándose mientras yo contestaba pacientemente las preguntas. Aunque no siempre estoy tan altruista...

* Trabajo a unas pocas cuadras de la Plaza y he vivido cosas, digamos, peligrosas varias veces. Ya estoy acostumbrado. ¡Usted nunca se acostumbre, Profe!

* "En cincuenta años se extinguirán mas de 30 especies"
¿La especie humana estará entre ellas?

27 noviembre, 2007 19:42  
Blogger Loca xq sí said...

justo el lunes viajé en el E con Celes, pero yo me bajé en la primer estación (ella tenía que seguir hasta el final) y le venía comentando que Metrovías, además de comprar los vagones usados a Japón, tenía que haber comprado el pack completo, con los "empujadores" incluídos...

y por cierto, M. había prometido 10 kms de subte por año de intendencia y, aún antes de asumir, ya bajó a 27 km totales, un 30% menos de lo prometido... cerdo

28 noviembre, 2007 10:24  
Blogger Amy said...

El apellido de M que no completaste me llevó a pensar en otro apellido también con M. ¡Me cacho! Estamos rodeados de M ¿tandrá que ver eso con los resultados de m.....? ¡No! hay otros que no empiezan con m y dan el mismo resultado de m.....

29 noviembre, 2007 03:13  

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